martes, 21 de enero de 2014

Las grandes decisiones de Joe Dumars

Al más puro estilo “Manos a la Obra” se maneja nuestro buen y apreciado amigo Dumars. Como si de una reforma se tratase el GM de Detroit Pistons lleva intentando tapar agujeros desde la temporada 2008-2009 cuando el proyecto campeón del anillo ya casi era inexistente. Acertando de manera inspirada, cuando ni el propio Joe D pensaba que podría suceder; una obra tras otra, algunas auténticas creaciones inolvidables, otras simples chapuzas, pero ahí sigue el bueno de Joe, haciendo de la suyas; es un manitas.

¿Qué ha sido de aquel brillante defensor, de aquel capaz de robarle el puesto a Vinnie Johnson, aquel que se ganó tan valiosos elogios de Michael Jordan? ;” Joe Dumars ha sido el mejor defensor que he tenido en toda mi carrera”. Queda una segunda vida, una vida polifacética llena de remiendos, repasémoslos.

Dejando referencias nefastas, cabe recordar que fue elegido el mejor General Manager del 2002/03 aún llevando tan sólo un par de años en el cargo; parece incluso que el actual Dumars sea una burla de lo que antaño fue, ya no de los epopéyicos Bad Boys que dieron a conocer la ciudad del motor , sino más bien de aquel gran gestor, casi genio dirían algunos, capaz de elegir a Darko Milicic con el número 2 del Draft de Carmelo, Bosh o Wade (jugadores que ahora anhelan los de Michigan), para posteriormente firmar a un Rasheed Wallace que acabaría siendo vital en el camino al anillo de Don Larry Brown. 

Larry y Joe

Todos conocemos lo que ocurrió a partir de ahí, y sorprende todavía el cambio de mentalidad; la mutación de una idea conservadora y fría (Milicic), a una más fogosa y temperamental (Sheed). Acertó con el hombre de las 38 técnicas que batió su propio récord con 40 al año siguiente; ese que pagó por un cinturón de la WWE para después dejarlo a plena vista en su taquilla, que servía para arengar a los suyos antes de cada partido. Esa “locura” de Dumars se podría definir como una chapuza en toda regla, pero nada en comparación con otros trabajos fenomenales como firmar a Ben Gordon y Charlie Villanueva para deshacerse de Billups y Rasheed.

Volviendo por los lares de la cordura, este verano volvió a hacer magia en los despachos. Brandon Jennings y Josh Smith comandarían el proyecto de obra en Detroit, siempre tutelados por su firme defensor (no olvidemos nunca la omnipresencia del señor Dumars por favor). La necesidad de traer al primero se puede debatir perfectamente, pero la del segundo es algo incoherente. Teniendo a dos jugadores interiores tan bien compatibles y con tanto futuro como Monroe y Drummond, ¿qué le pasaría por la cabeza cuando le ofreció a Josh Smith 54 millones de dólares por 4 años?. Quizás pensaba que entre los tres serían un filón en defensa, pero de nuevo se equivocó Joe, y eso me recuerda una cosa; otra vez tiró de chapuza.

En un universo paralelo en el que Joe Dumars fuese un tipo inteligente en sus planteamientos, racional y carismático, esta operación podría ser entendida como una valiosa moneda de cambio por jugadores jóvenes o picks del Draft, en cuyo caso sí sería un excelente primer paso para una futura reforma; pero dudo mucho de ello, el escepticismo me puede, y me plantea dudas como que si vale la pena cambiar a Josh Smith por Luol Deng  (antes de ofrecérselo Chicago a Cleveland), o de nuevo “chapucear” e intentar traspasar a Monroe ¿Por Afflalo, cuando en el pasado fue tuyo y no lo consideraste como merecía?;  o a Drummond para traer a ¿Rajon Rondo?!. Partiendo de la base de que son rumores (de medios oficiales americanos), si de nombres se habla es porque de nombres se conocen, y aquí no se salva nadie; aún no he visto claramente quién desempeña la función de jugador franquicia, quién es el pilar de este proyecto, ni a quién rodear de grandes jugadores, y eso es porque todo lo que se planifica se asemeja más a un trabajo casero que a un trabajo de profesionales.


No apostaría por ver si salen más nombres a la palestra, porque no quiero perder la apuesta, pero de buen seguro que algún que otro jugador saldrá relacionado con el entrono de los Pistons; y es una verdadera lástima, pues eso únicamente sirve para desestabilizar el conjunto y la química del equipo. Así juegan “nuestros” Pistons, sin alma ni compromiso y eso el rival lo percibe seguro. Hay goteras, grietas y humedades en esta plantilla, pero qué le vamos a exigir al bueno de Dumars, ya ha hecho suficiente con apostar por Maurice Cheeks y ese es otro tema que trataremos algún día. Que orgullosos estarían de ti Manolo y Benito Joe, que orgullosos.

Artículo escrito por @Daa_nii17ir cualquiera que quiera escribir, solo tiene que contactar conmigo, por cierto nunca me cansaré de poner el artículo de "Como largaron a Billups" de @GVazquezNY, el cual la mayoría habréis leído ya.

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